Christian Nodal interrumpe su concierto para subir al escenario a su esposa Ángela Aguilar
🔸 El espectáculo fue la primera presentación pública del intérprete después de su polémica y apresurada boda con la cantante de regional
SINALOA | Tras una boda enigmática y a toda prisa con Ángela Aguilar, celebrada en total hermetismo hace menos de dos semanas, Christian Nodal reanudó su carrera musical con un impactante concierto en el estadio El Encanto en Mazatlán. A pesar de la intensa lluvia que impidió que miles de fans se reunieran para ver al intérprete de “Adiós amor”, el evento se convirtió en una celebración inolvidable.
El espectáculo, que fue la primera presentación pública de Nodal después de su boda con Aguilar, estuvo marcado por un momento emotivo y sorprendente. Durante una pausa en su actuación, Nodal hizo una inesperada invitación a su esposa para que subiera al escenario, provocando una ovación estruendosa entre los asistentes. La aparición de Aguilar fue recibida con gritos de emoción, ya que los fans no esperaban ver a la famosa tan pronto.
“Señora esposa, ¿quiere salir a saludar?” fueron las palabras de Nodal mientras llamaba a Ángela desde el escenario. La cantante, que se encontraba tras bambalinas, accedió con gusto y se unió a su esposo para compartir un tierno y apasionado beso frente a miles de espectadores. Aunque el momento fue breve, dejó una profunda impresión en el público, quienes no dejaron de gritar “qué cante, qué cante” y “beso, beso, beso” durante la breve aparición de Aguilar.
En diversos clips grabados por los fans, se puede ver a Aguilar saludando al público con una sonrisa mientras Nodal continúa su show. La intérprete de “Gotitas saladas” se retiró del escenario poco después para permitir que Nodal reanudara su concierto, dejando a los fans con una experiencia que combina la pasión de su música con la emoción de su vida personal.
Este concierto en Mazatlán marcó la primera vez que la pareja se muestra públicamente después de su boda sorpresa, realizada el pasado 24 de julio en la hacienda San Gabriel de las Palmas en Cuernavaca, Morelos. La boda, que se mantuvo en estricto secreto, contó con la presencia de alrededor de 45 invitados, entre familiares y amigos cercanos