El nuevo muelle de Cozumel, otro proyecto prioritario de AMLO, en problemas
Una jueza ordenó la suspensión de la obra hasta que no se resuelva de fondo el tema de la concesión que estaba en manos de un particular quien solicitó su cambio a favor de Muelles del Caribe.
A poco más de 80 kilómetros de distancia del Tren Maya, en el Caribe mexicano, se alista otro proyecto prioritario para el presidente Andrés Manuel López Obrador que –al igual que la obra estrella del sureste– ha generado polémica por inconsistencias en los permisos de construcción, que podrían frenar definitivamente su desarrollo, y porque ambientalistas alertan que afectaría zonas donde habitan especies en protección y arrecifes de corales.
El proyecto del cuarto muelle para cruceros de Cozumel, Quintana Roo, con una inversión de 58 millones 617,023 pesos, registra irregularidades en su planeación y aprobación por parte de autoridades federales, pues no solo se pretende realizar en un área donde se prohíbe la construcción cimentada y las actividades de lucro, sino que se omitieron detalles de la concesión que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) había otorgado, al tiempo que la dependencia ignoró los impactos ambientales y zonas de protección declaradas por la misma.
En octubre de 2020, en medio de la pandemia de COVID-19, el presidente López Obrador, en conjunto con la iniciativa privada, presentó una batería de proyectos estratégicos para la reactivación económica.
Se trata de 39 obras en el sector de Comunicaciones y Transportes, Energía y Medio Ambiente, que en conjunto sumarían casi 300,000 millones de pesos y que generarían empleos y bienestar para la población, además de dar un impulso para el turismo, entre ellos el cuarto muelle.
Un año y medio después, la obra está en pausa hasta que la jueza Pamela López Swain, juez tercero de distrito en Cancún, resuelva las inconsistencias en el título de concesión, en manos de Muelles del Caribe, empresa encargada de la construcción, que se había otorgado antes a un particular para un uso distinto al que se requiere.
Si bien la solicitud de cambio de derechos ya se aprobó, se hizo después de que se avalara el proyecto, por lo que incumple las obligaciones que otorgó la Semarnat en un principio, razón con la que podría ser revocado.
Las irregularidades en el título de concesión
El 30 de noviembre de 2018, la misma Semarnat fue quien otorgó un título de concesión por 15 años que daba derecho a Daniel Fidelio Peraza Marfil de usar, ocupar y aprovechar la superficie de 1,144.3 metros cuadrados de la zona federal marítimo terrestre, ubicada en la Avenida Rafael E. Melgar, en el centro hotelero de Cozumel, exclusivamente para uso de ornato, es decir, para instalar a lo mucho sombrillas y camastros para recreación y sin fines de lucro, como consta en el expediente 673/QROO/2018 emitido por la dependencia.
En ese documento, en poder de Expansión Política, se establece que el concesionario debe abstenerse de llevar a cabo cualquier tipo de construcción y de llevar a cabo actividades relacionadas con la superficie concesionada que le genere ingresos directa o indirectamente o por conducto de terceros.