Canales destroza al Alavés y fija al Betis como tercero
Su zurda y sus movimientos recuerdan cada vez más a Julio Cardeñosa, uno de los mitos del beticismo. Sergio Canales es el líder del Betis y el fútbol que destila dispara las prestaciones de un equipo que tras arrollar al Alavés se atornilla en la tercera plaza de la clasificación. El Betis de Manuel Pellegrini disfrutó de las excelencias de un futbolista implicado, quien en la madurez de sus 30 años ofrece un magnífico rendimiento.
El beticismo es feliz con este gran Canales, que lo mismo levanta la cabeza en la banda izquierda y la pone como Rafael Gordillo, que es capaz de definir con un disparo a la escuadra después de una elegante conducción. Con libertad absoluta para moverse, Canales se asoció una y otra vez con Fekir, buscó las espaldas de la defensa del Alavés y todavía se elevó sobre el resto de sus compañeros para fijar, él solo, los tiempos del partido.
El Alavés de José Luis Mendilibar quedó rendido ante la inspiración y el talento del Betis, un equipo en un gran estado de forma que cuajó un auténtico partidazo y marcó goles de todos los colores para arrollar al conjunto vasco. El entrenador visitante pasó un mal rato en la banda por las facilidades que su equipo ofreció en defensa. Regalar tanto campo a Canales facilitó su obra de arte en el segundo gol del Betis. Lo del estadounidense Miazga en el tercero fue impropio del fútbol profesional. Un Alavés que ejerció una buena presión adelantada, con jugadores interesantes, como Rioja, quien, por cierto, no se cortó un pelo en pedirle la camiseta a Fekir en el descanso y con 3-0 en contra. Rioja, andaluz y sevillano de Las Cabezas de San Juan, es un ferviente seguidor del Betis.
Un Betis en el que Borja Iglesias recuperó el gol ayudado por la magia de los futbolistas que tiene detrás. Un equipo bien administrado por Pellegrini, que se encuentra vivo en las tres competiciones y que da la impresión de que llega lanzado al tramo decisivo de la temporada. Con su gente exultante tras eliminar al Sevilla de la Copa y con apenas 40 horas de descanso ante un Alavés que gozó de 10 días para preparar el partido, el Betis hizo un primer tiempo de gran nivel. Las llegadas al área de Pacheco fueron continuas desde el minuto dos, cuando Juanmi lanzó muy pegado al palo de Pacheco, impotente luego para detener el aluvión que se le vino encima. El Alavés lo intentó, sin duda, pero no es fácil detener a un equipo tan vertical y dinámico como el Betis.
Mendilibar intentó cortar la sangría haciendo tres cambios al descanso. Se encontró con la lesión de Duarte y la reactivación del aluvión que fue el juego del Betis, ahora con campo por delante para machacar a la contra. Fekir vio el veloz desmarque de Juanmi y este batió a Pacheco con una elegante vaselina. La fiesta fue de las grandes en Heliópolis, cuya gente atisba que este Betis puede hacer grandes cosas después de algunos años de mediocridad. Un deseo que se puede convertir en realidad con futbolistas como Canales o Fekir, acompañados de un grupo comprometido y con mucho gol, que devoró a un Alavés sin recursos con endiabladas transiciones. Con este triunfo ante el Alavés, el Betis permanecerá en la tercera plaza pase lo que pase en la siguiente jornada y antes del parón liguero por los partidos internacionales de clasificación para Qatar 2022.